En su slogan a la Bodega Nieto Senetiner se la considera como “hacedores y protagonistas de la historia del vino argentino” esto se debe gracias a su larga trayectoria en el país como productores y proveedores de vinos desde su creación en el año 1888.
De esta forma, la bodega inició su camino por la intervención de las manos de inmigrantes italianos que se instalaron en suelos de Vistalba, Luján de Cuyo Mendoza y dieron origen a la vitivinicultura argentina. En dicha ciudad, construyeron una casita histórica de estilo colonial y plantaron los primeros viñedos en la actual finca Villa Blanca.
Luego, en 1969 las familias Nieto y Senetiner compran la finca para ampliar sus instalaciones y viñedos al construir para muchos consumidores una “tradición que enamora”, en la consolidación de la historia de los grandes vinos argentinos.
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Una bodega de tradición argentina
Nieto Senetiner es una bodega que continúa la tradición que nace en el viñedo. Un camino que enlaza el trabajo artesanal, la tecnología y la tradición para formar experiencias autenticas al momento de disfrutar de imponentes vinos.
Respetando el estilo colonial de sus inicios, la bodega elabora sus vinos en piletas de distintos tamaños para procurar el cuidado de sus uvas. Se prioriza un tratamiento detallado en la producción del vino y en el almacenaje sobre barricas de robles. Como también, lo hacen en la especialidad de vinos espumantes.
Nieto Senetiner es un emblema de más de 140 años en la producción vitivinícola del país por el cual, es reconocido en el mundo como una empresa de renombre que exporta vinos y espumantes a más de 30 países, que lo convierte en un embajador internacional de la bandera argentina.
Por otro lado, la Bodega Nieto Senetiner busca constantemente renovarse y reinventarse en la producción de vinos, pero con el foco puesto en mantener la tradición, aunque a la vez ofrecer al consumidor algo nuevo y novedoso.
De esta manera, la bodega realiza una puesta a punto de la “Bonarda” en la cual emplea el lanzamiento de su línea “Nieto Senetiner Patrimonial” centrando su trabajo con cepas históricas de Argentina para que regrese a los hogares argentinos.
La propuesta está centrada en cuatro varietales como la Bonarda, Malbec D.O.C, Semillón y Criolla Grande. A todas ellas se les aplica un ajuste estilístico que integra al consumidor clásico y al nuevo. Es decir, se ofrece un vino más suave y fresco, con menos participación de la madera que lo convierte en un producto perfecto para acompañar la gastronomía.
Enoturismo en Nieto Senetiner
La Bodega Nieto Senetiner ofrece una oferta variada de opciones de enoturismo para aquellos visitantes que quieran conocer la historia de la bodega, sus viñedos y el proceso de elaboración del vino.
En el lugar, se pueden realizar visitas guiadas y degustaciones de vinos. Una experiencia que apela a los sentidos con el fin de reflejar y potenciar su identidad bajo una forma más renovada y estética, pero sin perder el horizonte de sus orígenes y tradiciones.
Se ofrecen tres opciones de degustación: Historia en Movimiento, Cadus y Selección del Enólogo.
Por último, es posible disfrutar de un almuerzo en la bodega con un menú de tres o cuatro platos de primera calidad y alimentos de confort al estilo hogareño.